MAMACRUZ, NUNCA ES TARDE PARA EMPEZAR A VIVIR.
Patricia Ortega, cineasta venezolana, ha regresado a Seminci, después de que en 2018 se llevase la Espiga Arco Iris con Yo, imposible, para presentarnos Mamacruz su última película.
La protagonista de esta historia es Cruz, una mujer de 70 años, ama de casa, cuyo día a día, consiste en ir a misa, coser ropa para santos y vírgenes, estar con su marido y cuidar a su nieta Viky, ya que su hija Carlota vive en el extranjero tratando de hacerse un lugar en el mundo de la danza.
Cuando Cruz, está usando la tablet para tratar de conocer un poco mas las nuevas tecnologías y así poderse comunicar con su hija, toca por error en un video de alto contenido sexual, y aunque su moral le impide verlo, las pocas imágenes que ha vislumbrado han calado hondo en su cerebro y vivirá sensaciones que tenía olvidadas.
Pero parece que su marido no es capaz de responder a este súbito ardor y decide acudir a una terapia sexual de mujeres que la llevará a replantearse su vida.
Gracias a ese grupo de mujeres, aprenderá que no hay una edad para empezar a vivir, y que cualquier momento es bueno para tomar las riendas de su propio destino.
El papel de Mamacruz, como así la llama su nieta, está encarnado por Kiti Mánver, en un personaje que conjuga ternura, vitalidad y mucha fuerza, sobre sus hombros recae toda la película.

Junto a Mánver encontramos a en el reparto a Inés Benítez, Silvia Acosta, Mari Paz Sayago y Pepe Quero, entre otros
En definitiva un coming of age de la tercera edad, que tuvo su estreno allá por el mes de enero en el Festival de Sundance, en la sección World Cinema Dramatic Competition, con muy buenas críticas.
Un homenaje a las madres y abuelas que deciden tomar las riendas de su propio destino.
No Comment